¿Odiás quedar con el rostro brilloso cuando te aplicás base? Este es un problema que sufrimos quienes tenemos piel mixta o piel grasa.
Un truco para impedir ese brillo poco atractivo es aplicarnos primer o prebase, un producto que no todas conocen, ni utilizan, pero que tiene muchos beneficios.
El primer se aplica antes de la base, preferentemente en aquellas áreas propensas a la sudoración como la frente, nariz, bozo y mentón. Este producto matifica la piel, de manera que no solo disminuye la sudoración del rostro sino que también ayuda a que el make up dure más tiempo.
Luego de aplicar la base, no te olvides del polvo traslúcido, que fija el maquillaje en la piel.